
Relato sexual de una esposa insatisfecha y una relación muy especial
Tenía apenas diecisiete cuando quedé embarazada de Mariana, era una tonta inexperta, y Enrique, el padre un estúpido confiado, porque el pisaba los treinta, y siempre me decía ‘no pasa nada, no pasa nada’. Fueron tiempos duros, porque yo aún