Comparto nuestro relato erótico esperando les guste ya que fue algo que disfrutamos mucho.
Aún recuerdo aquel día en que mi mujer Aleinad fue más sensual que cualquier otra ocasión, queríamos platicar y tomar unos tragos, pretendíamos pasarla bien! Por lo que ella se arregló de manera fantástica y muy sensual, tenía un vestido negro que le hacía ver esas hermosas piernas largas y contorneadas, con su hermoso pelo negro totalmente liso sobre sus hombros y aquella sonrisa que deslumbraba a quien la viera!
Cuando llegamos a un antro swinger que nos habían recomendado encontramos que solo había un par de parejas, por lo que nos hizo sentir un poco más íntimo el lugar. Ahí nos recibió el anfitrión muy amablemente y nos explico las reglas del lugar y sus instalaciones, al final nos dejó en una mesa para nosotros dos.
Ahí Aleinad y yo empezamos a platicar de nuestras fantasías y de si nos atreveríamos a cumplirlas, yo le propuse cumplir una de nuestras fantasías y era seducir a un extraño o extraña, por lo que ella me sonrió con su cara pícara y me contestó que tenía una idea.
Me tomó mis manos para meterlas entre su falda, sintiendo sus ricas piernas hasta llegar a su vagina totalmente húmeda, me besa y me dice al oído que seduciremos al anfitrión! Le pregunto si quería hacerlo con asombro y me causa mucha excitación escuchar que si, por lo que nos paramos a bailar y ella con sus encantos hace que se acerque, comenzamos a platicar bailando y no paso mucho rato cuando los tres cuerpos estaban demasiado cerca para solo ser una conversación!
Me asombro cuando ella lo besa, por que ella tiene un tabú con besar a un extraño o extraña; pero me fascina y me excita que lo haga, no la reconozco pero me siento orgulloso y atraído cada vez más hacia ella por desinhibirse; por lo que me acerco por la espalda y comienzo a besar sus hombros, subo el corto vestido y hago a un lado sus pantaletas, encontrando una vagina muy húmeda y caliente, meto mis dedos mientras ella lo sigue besando y el toma fuertemente sus hermosos pechos, alcanzo a escuchar un gemido y mi pene se erecta al máximo, tengo la necesidad de sentirla y penetrarla, por lo que subo tonalmente su falda y la inclino para que le haga sexo oral al anfitrión mientras la penetro fuertemente, siento cómo la humedad, lo caliente de su vagina y las contracciones que la ocasión producen me pueden hacer venirme por lo que me salgo y continúo estimulándola con la mano, siento lo excitada que está.
Alguien llama al anfitrión y se retira disculpándose, mientras tanto entramos a un cuarto oscuro en donde nos despojamos de la ropa, me sienta en un sillón y me empieza hacer sexo oral cuando de repente escucho sus gemidos y espasmos que hace con su boca, cuando alguien entra y acaricia su trasero, ella solo le responde con movimientos que lo invitan a penetrarla; el saca su miembro y la penetra, yo me desbordo de placer y veo que es un invitado del anfitrión quien la penetró.
Yo disfruto ver la escena donde ella disfruta y se deja llevar, algo que jamas pensé que pasaría; me siento llevado a un sueño o a una fantasía sexual dentro de una película, por lo que me excita aún más y ella me dice méteme los dedos en la vagina, yo sin saberlo y sorprendido descubro que la habían penetrado por su ano y estaba muy mojada, por lo que meto mis dedos en su vagina y descubrí que está aún más mojada y teniendo espasmos riquísimos, y me fascina oír sus gritos de placer.
Cuando el extraño termina en ella se monta sobre mi y me coge como pocas veces, yo estaba muy excitado por qué jamás había pensado en que mi amada pudiera concederme esa escena y mucho menos besar a alguien en la boca, todos los tabúes que restringían algunas fantasías los había hecho a un lado.
Cuando siento lo excitada que estaba y venirse en mi, no logro controlar mis impulsos y también me vengo con ella; una sensación tan rica y excitante. Nos vestimos como si no hubiera pasado nada y salimos a seguir platicando!
Afuera nos saluda el extraño que estuvo con nosotros en el cuarto y nos presenta a su pareja, le agradecemos la ocasión y nos despedimos. Si hubiéramos sabido en aquel momento que podíamos penetrar ambos nidos de placer lo hubiéramos hecho, pero fue perfecto al no haberlo planeado y que ella tomara la iniciativa, haciéndome el hombre más afortunado y y feliz por tener a la mujer más sexy y excitante del mundo, por cumplir mi fantasía de hacerlo en un bar y dejarse llevar quitando sus tabúes y miedos!
Este relato es para agradecerle ese bello y excitante recuerdo a mi amada. Saludos, GD y DB.
Imagen únicamente de caracter ilustrativo para este relato erótico…
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