Hola amigos! Aquí les enviamos algunas fotos de los diferentes momentos de placeres vividos, para que se deleiten con el cuerpo de mi cincuentona puta esposa. Les agradecemos por todos los correos que nos han enviado con sus ardientes comentarios y las propuestas sugeridas. En ellos nos han pedido fotos porno donde se vea en acción el anillito de cuero de Noemí.
Aquí hoy les mostramos una previa, primero algo muy íntimo donde está descargando sus urgencias sobre el trono blanco, luego una dilatación y toma de temperatura a su palpitante ano antes de iniciar la exploración intensiva y profunda con mi pija de ese santuario del éxtasis que más adelante podrán contemplar en todo su esplendor.
La fantasía sexual de mi ciencuentona puta esposa
Les comento que Noemí vuela de calentura al fantasear que por obra del azar tal vez sería posible, por ciertos detalles que se nos hayan escapado en las fotos, que un hombre muy perspicaz la pueda llegar a reconocer en nuestro querido Banfield (O), en el GBA e imagina que puede ser cualquiera de aquellos con los que se relaciona a diario por ejemplo al realizar las compras más usuales o que habite en la vecindad.
Ella gime de placer al sentir que éste macho en celo se haya enterado de sus deseos más profundos en EyM, pero que finja y guarde silencio sobre todo lo que ella ha mostrado para luego de manera pérfida y astuta poseerla de todas las maneras más perversas posibles.
Ella entiende que ante los vecinos del barrio siempre se debe mantener una conducta intachable de señora decente y de familia; confiesa que ante el caso de ser descubierta accedería a hacer cualquier cosa en una cama con su posible delator para evitar pasar por semejante vergüenza social y familiar.
Afirma con sinceridad que le fascinaría que la vieran coger y culear como una auténtica puta sin pudor ni piedad con dos vergas bien grandes a la vez; siente que una mujer debe ser domada y sometida por un varón bien dotado y potente a fin de disponer del sexo de su hembra como todo un Amo y Señor.
Galería de fotos de mi madura esposa argentina
Como ven la mente de Noemí es un enigma, mientras se ve obligada a mantener las formas y resguardarse en un anonimato ella quiere ser expuesta y exhibida sin reservas, más luego anhela que haya algún otro que la descubra, para ser dominada por éste a voluntad ya que conocería todos sus secretos prohibidos. Después de escucharle todo este rollo y morbo, al final ¡cómo no echarle semejante lechazo en la chucha!
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